Los efectos del paso del tiempo es una cuestión que preocupa a muchos pacientes, que desean rejuvenecer su imagen, pero que recelan de pasar por quirófano. Para aquellas personas, los hilos tensores son una buena alternativa. Con esta técnica podemos eliminar los primeros signos de envejecimiento y reafirmar la piel de la cara.
¿Qué son los hilos tensores?
Los hilos tensores son, como su propio nombre indica, unos hilos finos empleados en cirugía estética para rejuvenecer el rostro. Sus usos son múltiples. Se pueden aplicar tanto para eliminar las arrugas y la flacidez, como para levantar las cejas o redefinir el óvalo de la cara y el contorno de la mandíbula. Además, no solo devuelven tersura al rostro, sino que contribuyen a la producción de colágeno, algo esencial para que la piel se mantenga joven y con luminosidad.
Es una técnica que lleva años implantada, pero que ha evolucionado enormemente desde que comenzó a practicarse. Hoy en día, los hilos tensores están fabricados con materiales biocompatibles y reabsorbibles, por lo que la aparición de alergias y
complicaciones es casi nula.
¿Cómo se realiza la técnica de hilos tensores?
Una de las grandes ventajas con las que cuenta esta técnica es que se puede realizar de forma ambulatoria, con anestesia local. El paciente no sufre los inconvenientes que tiene otros procedimientos de rejuvenecimiento facial como el lifting, para el cual sí que se necesita un posoperatorio más intensivo. De hecho, el paciente puede volver a su vida normal casi inmediatamente.
La técnica consiste en introducir los hilos, que pueden ser de diferente grosor y materiales, en la dermis mediante una aguja guía, forjando una especie de red que tensa la piel. Es una operación rápida y cuyos resultados mejoran con el paso del tiempo, aunque son visibles desde el primer momento.
Los resultados que arroja este procedimiento no son definitivos, pero si se combinan con otros tratamientos estéticos, son muy duraderos, llegando a un período de actuación de entre un año y un año y medio.
¿Cuándo someterse a una intervención con hilos tensores?
Esta técnica, aunque muy eficaz, no es capaz de obtener los mismos resultados que un lifting facial. La edad es, quizás, el índice de referencia por el que el cirujano debe guiarse a la hora de proponer una solución u otra. Aunque, cada persona es un mundo.
El estilo de vida o la alimentación, entre otras variables, condiciona el estado de la piel de cada paciente.
Como se ha mencionado al principio del artículo, el mejor momento para emplear los hilos tensores es cuando aparezcan los primeros signos de envejecimiento. Como norma general, se recomienda emplear hilos tensores a partir de los 35 años.
Si tienes dudas, lo recomendable es que acudas a tu cirujano. Él te aconsejara y te brindará la solución que más se adapte a tus necesidades.
Dra. Lucía Jáñez
Especialista en medicina estética. Su filosofía es la naturalidad, la armonía y la elegancia. Realiza tratamientos personalizados para cada paciente, puesto que no hay dos rostros iguales. Cirujana oculoplástica, oftalmóloga y una de las mejores especialistas en Medicina Estética. Autora de numerosas publicaciones nacionales e internacionales en revistas y libros de prestigio.