El drenaje linfático contribuye a que el sistema linfático del cuerpo humano realice sus importantísimas funciones de forma adecuada. Además, tiene numerosos beneficios en estética y salud, y está indicado para aliviar problemas muy variados, desde mejorar la celulitis hasta apoyar a los procesos postoperatorios de la cirugía estética.
El sistema linfático es el encargado de transportar linfa, un líquido compuesto de glóbulos blancos que, al circular más despacio que la sangre, se satura con facilidad por diferentes causas (una mala alimentación o la toma de poca cantidad de agua son solo algunas de ellas). A través del sistema linfático, el cuerpo humano elimina toxinas y deshechos. También contribuye en el correcto funcionamiento del sistema inmunológico, interviene en la absorción de vitaminas y evita la acumulación de grasa y líquidos. Cuidar de él es, por lo tanto, vital. Durante el proceso del drenaje linfático, el profesional aplicará un masaje manual con movimientos de presión suaves y repetitivos para mover (drenar) la linfa estancada. Gracias a esta técnica, se pueden conseguir numerosos beneficios además de corregir algunos problemas. Sus múltiples beneficios se sienten de forma inmediata pero no se mantendrán para siempre. Por ello, tras un drenaje linfático será importante mantener el cuidado del sistema. El cirujano plástico Dr. Alfredo Fernández Blanco se destaca en su rama de la medicina, como el mejor cirujano de mamas, además es pionero en las llamadas cirugías secundarias o de las secuelas. Con más de 30 años de experiencia y miles de casos de éxito, sigue logrando los resultados más naturales que se pueden esperar en una operación de cirugía estética.
Dr. Alfredo Fernández Blanco